EL TRASTORNO DE DÉFICIT DE ATENCIÓN E HIPERACTIVIDAD
Ruidosos, maleducados, molestos……son algunos de los términos que se utiliza cuando se habla sobre aquellos niños que no dejan de hablar, moverse, irrumpir y molestar a los demás.
Ruidosos, maleducados, molestos……son algunos de los términos que se utiliza cuando se habla sobre aquellos niños que no dejan de hablar, moverse, irrumpir y molestar a los demás.
Los padres pueden sentirse inseguros si es bueno o no que sus hijos los vean desnudos. En esta entrevista, de un periódico local, Coks da su opinión:
La rutina es importante para el niño en cada etapa de su infancia. Cuando es bebé, aprende a reconocer la secuencia de los cuidados que le profesas: primero la toma, después el baño, los mimos y juegos y finalmente a dormir.
Todos los hermanos sienten celos entre sí. Y los hijos, nacidos de un parto múltiple, no son una excepción. Los celos siempre tienen que ver con la lucha por la atención paterna.
Todos los padres comparan a sus hijos. Por ejemplo el mayor es muy dulce y el pequeño tiene mucho genio. Lo hacemos para entender mejor sus caracteres. Mientras no exageremos las comparaciones ni las profiramos en cada momento, no hacen daño.
La timidez es un tema sobre el que bastantes padres me consultan. Por ejemplo: ‘Es tan tímido. ¿Qué hago para que no lo sea? O ‘No quiero que sea tan tímido como siempre lo fui yo. ¿Cómo le ayudo?’.
Una madre me escribió lo siguiente: mi hija de 5 años tiene últimamente miedo a ir a cualquier parte de la casa sola; no quiere ir sola al baño, ni a la cocina, ni a la planta de arriba. Así que está todo el día pegada a mí, a su padre o su hermana.
Ya traté el tema de las preguntas de los hijos sobre la sexualidad. Ahora analizaré otras preguntas que suelen ser difíciles para los padres.
Los niños son curiosos por naturaleza. Hacen todo tipo de preguntas, tanto del estilo de ¿por qué sale agua del grifo? como ¿de dónde he salido yo? Ambas preguntas son normales para ellos, pero las del último estilo tienen para nosotros un significado especial, ya que nos obligan a revelar algo de nuestra vida sexual.
Prácticamente todas las mujeres temen de algún modo el parto. Unas más que otras, pero a nadie le deja indiferente. Y esto es lógico ya que el parto es como una gran aventura de la que no sabes qué esperar. Cada parto es una gran incógnita incluso una segunda o tercera vez.
Aquí te ofrezco unas pautas para que afrontes tu parto con una actitud positiva y abierta.