Deben hacer su trabajo mientras uno, dos, tres o más hijos corretean a su alrededor. Todo un reto porque es una combinación de tareas contrapuestas. No pretendo tener la solución, porque no la hay, pero si algunas sugerencias que pueden haceros la vida algo más ligera. Yo misma he sido madre trabajadora en casa durante muchos años, también en épocas de verano cuando mi tribu disfrutaba de días sin cole:
• Mantén un ritmo. Empieza a una hora establecida. Trabajar en casa requiere mucha disciplina. Vístete como si fueras al trabajo porque esto eleva la moral. La rutina es primordial, pero al mismo tiempo necesitas ser flexible: con los niños muchas veces ocurren cosas inesperadas. El bebé devuelve su toma, el mayor parece estar malito……
• En caso de que los dos trabajéis en casa, alternad los turnos. Haz un esquema de modo que cada uno tenga su tiempo para el trabajo. Aprovecha al máximo las horas en que los hijos duermen, como las primeras de la mañana, levantándote pronto o las siestas. Si a uno no le da tiempo terminar su trabajo, revisa el horario o bien recurre a ayuda externa. Quizá una vecina puede quedarse un rato al cuidado de los hijos (en caso de que aun podáis recibir visitas). Esta opción es especialmente importante para los padres que están solos, sin pareja.
• Sé realista. Trabajar en casa también significa que no siempre llegarás a todo lo que te propones. Haz un planteamiento a corto plazo y otro a largo plazo. De este modo podrás cambiar con mayor facilidad de una tarea a otra. No pongas expectativas muy altas, porque conducirá a frustraciones. Céntrate más en lo que lograste hacer en vez de lo que quede por hacer.
• Aprovecha las posibilidades que ofrecen la tele, tablet etc. para tus hijos, para tener una hora o dos para tu trabajo. En general es bueno limitar el tiempo que los niños pasan delante de la pequeña pantalla, pero esto es una situación especial. Además aquí conjugan varios factores: es importante que puedas terminar algo que traes entre manos. Teniendo los niños entretenidos, podrás adelantar más. Esto a su vez favorece el ambiente en casa ya que estás de mejor humor. Y luego estarás más disponible para ellos. Pon tu móvil en modo silencio cuando estás con ellos.
• Prioriza. Ahora te faltará tiempo, así que conviene hacer lo más imprescindible. Seguramente las tareas domésticas no se puede hacer con la misma rutina y limpieza de siempre y planchar ahora también es un lujo. El baño diario de los niños se puede hacer en días alternos. De este modo creerás tiempo.
• No mires las noticias poco antes de empezar el trabajo. Las noticias son alarmantes, cada día de nuevo. Esto hace que tu mente se vuelva intranquila. Tu cerebro necesita seguridad y tranquilidad para poder trabajar óptimamente En general es importante no escuchar todo el día las noticias, limitarte a dos veces es mejor. Tu cerebro no puede con tanto input.
• Este tiempo difícil nos hace ver lo que es importante para cada uno. ¿Qué es lo que echas de menos? ¿Qué es lo que te alivia no tener que hacer? En este caso ya sabes lo que después del tiempo del Corona virus, debes eliminar de tu vida. Seguramente disfrutas del tiempo de calidad con tu pareja y con tus hijos, otro punto a tener en cuenta cuando todo vuelva a la normalidad. Y seguramente percibes ahora mucho mejor lo que son tus prioridades. Como: quiero tener otro trabajo. O quiero seguir trabajando en casa por lo menos dos días a la semana. Estos son los puntos positivos de la situación.
Coks Feenstra
Autora del libro ‘El Gran Libro de los Gemelos’