LA ESCUELA EN CASA

Coks Feenstra · Psicóloga Infantil

11 de enero de 2014

LA ESCUELA EN CASA

Hay padres que optan por la escuela en casa. Coks responde preguntas sobre esta práctica.

¿SON CONDENABLES ESTOS PADRES?

Los padres que optan por la enseñanza en casa, suelen ser padres muy bien preparados y con una fuerte ideología. Son, más que condenables, admirables en mi opinión, por el tiempo que dedican a sus hijos, por sus esfuerzos, por su valor de ir en contra de lo socialmente aceptado y por ser fieles a sus principios. Quieren darles a sus hijos la mejor educación en todos los sentidos y en todos los ámbitos: lo familiar y lo escolar.

Algunos lo hacen por motivos religiosos, pero la mayoría lo hace porque cree que el sistema educativo no beneficia el bienestar del niño por, entre otras causas, su temprana separación de los padres; por los horarios excesivos, por la excesiva presión; el sistema fomenta la competitividad en vez del libre pensamiento del niño; es un medio de formación de masas, en vez de destacar las capacidades individuales de cada alumno; la homogeneidad en vez de la diversidad. Otro motivo para los padres es que el colegio ha dejado de ser un transmisor de valores y ya no es capaz de garantizar la transmisión de valores como el respeto, la tolerancia, la no-violencia y por ello prefieren ser los responsables de le enseñanza de sus hijos.

¿POR QUÉ SE LES CRITICA TANTO?

La gente en general tenemos una actitud gregaria: todo lo que no se atiene a una actitud mayoritaria, como en este caso la escolarización de los niños, nos desagrada. Nos confunde a un nivel profundo, porque pone en duda nuestras propias decisiones. Por eso siempre existe una cierta presión de fuera para que todos andemos por los caminos considerados como ‘correctos’.

¿ESTOS PADRES INCUMPLEN LA LEY?

La declaración de los derechos de la infancia dice que todos los niños tienen derecho a la educación. Los padres son los primeros responsables de la educación. La Constitución consagra el derecho de los padres a elegir la educación que consideren adecuado para sus hijos e hijas. Según el artículo 27.3: Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus convicciones.

A pesar de que obviamente los padres pueden decidir de forma consciente de no delegarla, si así lo desean, la LOE no reconoce expresamente esta opción educativa ya que sostiene que la enseñanza básica (Primaria y Secundaria) es obligatoria. Por lo tanto, existe un vacío legal; la educación en casa no está regulada. Y en ocasiones esta situación conduce a situaciones de enfrentamiento con la Administración, que considera la no-escolarización como un abandono. En otros países como EE.UU., Canadá, Reino Unido, Francia e Italia la enseñanza en casa está legalmente aceptada y se permite. En estos países existen ayudas en forma de programas educativos que los padres pueden utilizar en la enseñanza en casa. Son herramientas útiles que facilitan la labor.

¿NOS PUEDES CONTAR ALGO SOBRE LA HISTORIA DE ESTA TRADICIÓN?

La enseñanza en casa, la objeción a la escuela, tiene una larga tradición, sustentada por filósofos como John Locke. Pero ya Seneca, en la antigua Grecia, decía: “Non scholae sed vital discimus”. No del colegio aprendemos, sino de la vida. Margaret Maed, una de los grandes antropólogos del siglo pasado, cuenta: “Mi abuela no quería que fuese una mujer culta e instruida y por esto no me llevó al colegio”. Y Jane Austen, escritora británica destacada (1775-1817), recibió la enseñanza en casa de su padre. También Teodore Roosevelt, por ser un niño enfermizo, recibió la enseñanza en casa.

¿CÓMO ES LA SOCIABILIDAD DE LOS NIÑOS NO ESCOLARIZADOS?

El supuesto problema de la socialización del niño no existe: a parte del colegio hay plenas oportunidades para que el niño se relacione con otros niños. Por ejemplo, yendo a talleres, clubs (deportes, música), academias para una tercera lengua, niños de la vecindad, campamentos, etc. Además, estos niños suelen estar mucho más en contacto con adultos, de diferentes edades y orígenes, gracias al íntimo contacto con sus padres: les acompañan a sus actividades, a sus reuniones, etc. y tienen una convivencia más estrecha con sus progenitores que los niños escolarizados. Esto les da una mayor soltura y facilidad para estar con adultos. Los consideran como sus ‘iguales’. En EE.UU. y en Reino Unido se han hecho muchos estudios sobre este tema y según sus datos, queda demostrado que los adultos educados en casa tienen habilidades de comunicación, nivel laboral, económico y social igual o mejor que los que se educaron en colegios.

¿CUÁLES SON LOS RESULTADOS ACADÉMICOS DE ESTOS NIÑOS?

Según los datos, recogidos en varias investigaciones americanas e inglesas, los alumnos de una educación en casa, evaluados con medidas propias de las instituciones escolares, consiguen un nivel de conocimientos muy bueno, comparado con los alumnos escolarizados. Hay otros efectos más difíciles de medir, como la autoestima, creatividad, la capacidad para resolver problemas, la felicidad………

Unos datos sobre estos aspectos: el doctor Shyers, de la Universidad de Florida, comparó 70 niños con edades comprendidas entre 8 y 10 años de ambos grupos (escolarizados vs no-escolarizados) en algunos aspectos, como por ejemplo a la autoestima. No encontró ninguna diferencia significativa. Y observando cómo se comportaban en contacto con otros niños, en cuanto a la asertividad, tampoco halló diferencias. Sólo descubrió, presenciando las sesiones de juego de ambos grupos que los niños no escolarizados tenían menos problemas de conducta que el otro grupo. Se concluyó que el contacto con los adultos es el que realmente hace sociables y enseña a los niños más que el contacto entre los coetáneos. Thomas Smedley, otro psicólogo que trabaja en este campo, evaluó un grupo de 20 niños de ambos grupos en cuanto a sus capacidades comunicativas, socialización y habilidades diarias. Concluyó que los primeros son más maduros en estas áreas.

¿CON QUÉ PROBLEMAS PUEDEN ENFRENTARSE, A LA LARGA, ESTOS NIÑOS?

Los niños, desde pequeños, se enfrentarán a preguntas de otros niños sobre el motivo de su no-asistencia a clase. Y generalmente a los niños no les gusta ser una excepción ni llamar la atención. Por lo tanto desde pequeños tienen que aprender a lidiar con este tipo de preguntas. Es un obstáculo que sobre todo en la fase de Primaria se puede superar, pero puede hacerse más complicado durante la adolescencia cuando la búsqueda hacia la propia identidad se acrecienta. Es la edad en la que el grupo de coetáneos cobra importancia y el formar parte de alguna pandilla empieza a ser esencial. Al mismo tiempo es la fase en la que el joven comienza a distanciarse de sus padres y rebelarse contra ellos, un paso necesario para encontrar sus propias ideas. Si éstos encima son sus profesores, la situación no es nada fácil. La doble función de padres y profesores puede dificultar esta fase que por sí ya es complicada. Además, los jóvenes en este periodo necesitan una cierta estructura, un horario establecido para no perderse en la vaguedad, algo que la enseñanza en casa no siempre ofrece.

En cuanto a la capacidad de soportar la frustración, vivir el espíritu de superación o colaboración no veo diferencias: tanto en un sistema como en otro el niño aprende estas cualidades. La enseñanza en casa no está exenta de frustraciones, ni de vivencias de superación. Incluso la capacidad para trabajar juntos se puede enseñarle en casa, haciendo labores con los hermanos, los primos o en sus talleres o actividades ‘extraescolares’.

¿PARA QUÉ TIPO DE NIÑOS LA ENSEÑANZA EN CASA ESTARÍA DESACONSEJADA Y PARA CUÁLES NO?

Para los niños que siempre buscan la compañía de coetáneos, que detestan estar solos, que no son nada solitarios y que afloran en grupos, haciendo de líderes, organizando actividades y delegando tareas, la enseñanza en casa puede no ser lo más idóneo. Pero también depende de cómo vivan sus padres. Si forman parte de una comunidad (agrupación de más padres), este problema deja de existir. En general es más fácil señalar para qué niños la enseñanza en casa es una buena opción, como los niños con altas capacidades intelectuales y/o dones especiales. La enseñanza en el colegio va dirigida a ‘la media’ y no a la pluralidad de los niños. Implica que los niños muy inteligentes no encuentren –salvo excepciones en caso de profesores muy motivados- reto alguno en las asignaturas. Se aburren, pierden la motivación, se sienten frustrados y muchas veces no se encuentran a gusto con sus compañeros, porque sus inquietudes son totalmente distintas a las de su edad. Empiezan a odiar los días lectivos, desarrollan enfermedades somáticas y algunos hasta una fobia escolar. Si se les dejan estudiar en casa, cambian completamente y vuelven a estar interesados, curiosos y con afán por aprender.

Lo mismo ocurre con niños con dones especiales, como un don para la música, el deporte, las artes……. Estas cualidades tampoco se les prestan mucha atención en el sistema educativo. Luego también hay niños pequeños muy sensibles que sufren la separación de los padres, otros que son víctima de acoso escolar…….Es otro grupo de niños que se beneficiarían de una enseñanza en casa. También debemos pensar en el niño afectado con algún tipo de trastorno, como el síndrome de Asperger (u otros), que puede estar beneficiado por la enseñanza en casa.

En los últimos meses varias familias (una con trillizos y otras dos con gemelos) han decidido no llevar a sus hijos a la Escuela Infantil, por no ver respetado su deseo de que sus pequeños empezaran la etapa escolar juntos. Son casos en los que los padres optan por la no-escolarización al enfrentarse con una norma con la que no coinciden. Pienso que es una pena que esto tenga que ocurrir y demuestra lo cerrado que está el sistema escolar actualmente. Estos padres no quisieron optar por la escuela en casa, pero se ven obligados a ello, por lo menos durante algunos años, porque no consideran a sus hijos preparados a sufrir una doble separación (la de los padres y la del hermano gemelo o hermanos trillizos).

Se puede leer más sobre la escolaridad y la edad idónea para empezarla en este blog:

KUKUSHKA-TEAM: BAÚL DE KUKUSHKA: COLEGIO O NO COLEGIO CON TRES AÑOS

Asimismo debemos ser realistas y reconocer que esta opción sólo existe para familias con medios económicos, intelectuales y culturales. Requiere que los padres trabajen menos (muchas veces es la madre la que deja su trabajo o ambos optan por jornadas reducidas), también hay entre ellas muchas familias que trabajan en casa, lo cual facilita la enseñanza a los hijos. También deben tener un cierto nivel académico para poder enseñar. Y al mismo tiempo suficientes ingresos para los gastos adicionales, como cursillos ‘extraescolares’, tutores para ciertas asignaturas o talleres.

¿QUÉ PUEDE IMPLICAR ESTAR 24 HORAS DEL DÍA CON LOS PADRES?

En general estos niños disfrutan de un mayor contacto con sus padres, pero no es cierto que pasen todo su tiempo con ellos. También juegan en casa de amigos, van a sus talleres y actividades ‘extraescolares’; duermen en casa de sus familiares; en otras palabras están inmersos en el mundo que les rodea e incluso forman parte más activa de él al no pasarse gran parte de sus días en un instituto cerrado (acompañan a sus padres a múltiples actividades). El niño se desarrolla en y con la compañía de sus padres, lo cual desde el punto biológico es más sano y normal que tener vidas separadas. Si esto incluye un excesivo control de los padres, depende de ellos mismos, pero no necesariamente debe ser así. El niño pasa también mucho tiempo fuera de la vista de sus padres, jugando, inventando sus historias y sus juegos. Quizás el control se vuelve más patente durante la adolescencia cuando el joven necesita evadirse, salir de casa, no verse con sus padres.

Para más información:

Asociación para la Libre Educación ALE www.educacionlibre.org

Esta entrevista salió en la revista Psychologies, 2009

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