De repente me encontré con una madre que paseaba con sus mellizos, niño y niña, de 3 años. Empezamos a hablar y ¿cómo no? terminamos hablando del colegio. De la eterna cuestión “Juntos en clase o ¿no?”
Me contó que había visitado varios colegios, todos cerca de Valencia. Y en todos, menos uno, le habían dicho que lo mejor era separar, porque esto les facilitaría encontrar su propio ‘yo’ y adquirir autonomía. Y que, además, los estudios así lo demostraban. La madre parecía un poco confusa. No sabía muy bien qué pensar. Sus mellizos estaban muy bien compenetrados, jugaban mucho juntos, se llevaban bien, pero también se peleaban bastante. El niño estaba más pegado a su hermana, que al revés; le gustaba que ella estuviera pendiente de él. Así que pensaba que él lo pasaría mal.
‘Ya te iré contando’, me dijo cuando nos despedimos. Durante el resto de mi paseo quedé pensando. Los varones, efectivamente, tardan más en madurar a nivel emocional. Es sabido que a ellos les cuesta más la separación de la madre. Las niñas adquieren antes esa madurez emocional. Así que seguramente la madre lo intuye bien y al niño le costará estar sin su hermana. También sabemos tal como lo expliqué en otro artículo de esta web, que los gemelos y mellizos son el uno para el otro, personas de apego, tal como lo son los padres. Esto implica que realmente para ellos vaya a haber una doble separación cuando entran en la Escuela Infantil.
Me chocó la certeza con la que los colegios que visitó esa mama, airean estudios no existentes, basados en mitos. ¡No hay ningún estudio científico que afirme que la separación a los tres años sirve para que los gemelos adquieran mayor autonomía! Nuestra lucha para promover una actitud más flexible y respetuosa con el colectivo de hijos de partos múltiples, aparentemente no ha llegado aún a todos los centros educativos, concluí decepcionada.
Seguí pensando en lo que podría ocurrir. Por mi experiencia ya puedo hacerme una idea: el niño llorará y lo pasará mal. El colegio lo atribuirá a problemas con la adaptación a la vida escolar y lo quitará importancia. En ningún momento piensa que estando con la hermana el niño se podrá tranquilizar y adaptarse bien. ¿Dependencia? Sí, pero la normal entre gemelos de corta edad. Es una fase evolutiva de su relación intergemelar que colmará en unos años en una independencia sana. Hay muchos años por delante para aprender a estar el uno sin el otro. Es cuestión de tiempo. Seguramente a los 6 años le encantará estar con sus amiguitos y no echará en falta a su hermana.
El niño pasará tres meses malos. Todas las mañanas llora al entrar en el cole. Se ha vuelto a hacer pis por la noche y su sueño es intranquilo, con muchos despertares. Pasado el primer trimestre, deja de llorar. Se ha adaptado, concluye el colegio. En realidad el niño se ha adaptado al hecho de que nadie tome en serio su tristeza y ha aprendido a no mostrar sus emociones, porque no son escuchadas. Tiene una herida en su alma, invisible, pero presente que con el tiempo se cicatrizará.
De repente se me antojó otra posibilidad:
El niño, efectivamente, está triste y lo pasa mal. Su maestra, cariñosa y perspicaz, ve cómo a veces el niño se esconde en la fila de la hermana a la hora de entrar y lo ve feliz jugando en el patio, cerca de su hermana. Ella, tía de unos sobrinos gemelos, opina que debe estar con la hermana y lo comenta a la directora. Esta no lo ve bien, pero decide investigar sobre el desarrollo emocional de los gemelos, mirando en Internet. Queda impresionada por la cantidad de artículos y del mundo apasionante de los gemelos. Se da cuenta que los hijos de partos múltiples tienen necesidades especiales. Da luz verde para el cambio de clase. El niño entra ahora todos los días con una gran sonrisa en su cara. Ha vuelto a ser él.
Esa segunda posibilidad es para la que luchamos con tal de conseguir una entrada feliz para todos los gemelos, mellizos y trillizos.
Más sobre ello en mi libro ‘El Gran Libro de los Gemelos, Ediciones Médici y también en las redes sociales, buscando FB Múltiples juntos en clase, decisión de Padres, por Meritxell Palou y Youtube Gemelos y Mellizos en el Cole, por Alberto Soler.