Todos estos temas los investigó Lynn M. Gordon, Ph.d, profesora del Departamento de Educación de la Universidad Estatal de California (Northridge) en la que participaron 131 directores de colegios, 54 maestros, 201 padres de gemelos y 112 gemelos (46% de 5 años o menores, 23% de 6-11 años, 14% de 12-18 años y 17% de 23-46 años).
Del grupo de gemelos, un 74% de los gemelos era dizigótico (mellizos) y un 26% era monozigótico (idéntico).
Es la primera investigación que explora las creencias de directores en cuanto a la ubicación de gemelos en clase al inicio de su etapa escolar (a la edad de 4 ó 5 años en EE.UU.). En este continente uno de cada 30 nacimientos es gemelar, por lo que en cada clase puede haber una pareja de gemelos. Esto hace patente la importancia de una buena política basada en datos científicos a la hora de decidir sobre este asunto.
RESUMEN DE ESTUDIOS ANTERIORES
Se han hecho numerosos estudios sobre el tema ‘separar o no’. Helen L. Koch, en 1966, constató que los gemelos, con edades comprendidas entre 5 y 7 años, rendían mejor cuando estaban juntos y gozaban de más popularidad que cuando estaban separados.
Van Leeuwen y colegas, en 2005, no encontraron diferencias a nivel académico entre gemelos separados o juntos de Primaria, pero sí constató que los primeros tenían más problemas emocionales (retraimiento, molestias psicosomáticas, ansiedad y tristeza). Este último hecho ya constató Tully y sus colegas en un exhausto estudio entre gemelos de 5 a 7 años en 2004. Tully concluyó también que el grupo de gemelos separados tenían más problemas académicos en comparación con el grupo no separado.
Webbink, Hay y Visscher, en 2007, concluyeron que el grupo no separado puntuaba más algo en lectura, pero no encontró otras diferencias a nivel cognitivo. Conventry y colegas, en 2009, constataron también mejores puntuaciones en lectura en los primeros años escolares en los gemelos que estaban juntos.
Grime, 2008, examinó cómo gemelos de 6 a 9 años valoraban la separación de clase y concluyó que esa les causó emociones como tristeza, pena, enfado, soledad y miedo que les impedían rendir bien en sus tareas.
LOS RESULTADOS MÁS IMPORTANTES DEL ESTUDIO DE GORDON
• 71% de los directores está a favor de la separación y un 84% opina que la medida favorece el desarrollo de la individualidad de los gemelos.
• 27% de los directores reconoce que impone esta medida contra la voluntad de los padres.
• 51% de los directores que está a favor de la separación, opina que la medida favorece el rendimiento de los gemelos y un 22% piensa que los estudios así lo demuestran.
• 90% de los profesores admite no tener ningún inconveniente en tener gemelos en clase.
• 62% de los padres está a favor, al inicio de la etapa escolar, de tener a sus gemelos en una clase, aunque 58% de los gemelos están separados.
• 95% de los padres opina que es inaceptable que sean los directores los que deciden sobre la ubicación de sus hijos en el aula.
• 81% de los gemelos prefiere estar juntos en los primeros años de su vida escolar. De las gemelas idénticas, el 100%, expresa este deseo.
• A medida de que los gemelos crecen, cambia su preferencia y aumenta ligeramente la de estar separados.
• 20% de los gemelos sufre un trauma a raíz de la separación de clase.
LOS DIRECTORES ESTÁN A FAVOR DE UNA SEPARACIÓN DE CLASE
Como podemos ver en estos datos, fueron los directores (71%) los que principalmente estaban a favor de una separación, en comparación con los profesores (49%), padres (38%) y los mismos gemelos en la edad de 4 a 7 años (19%). Esta preferencia, en 84% de los casos, está basada en la convicción de que el individualismo es un valor importante que en caso de los gemelos está comprometido. Por tanto hay que estimularlo. Solo separados el uno del otro pueden desarrollar la propia identidad, según esa visión. Una pareja de gemelos que expresa su deseo de estar juntos, está considerada como un caso de dependencia.
Los directores opinaban que los gemelos que están separados, rinden mejor en clase y una parte de ellos, el 22%, opinaba que los estudios lo demuestran (una suposición errónea).
Solo el 29% de los directores opinaba que los gemelos no deberían ser separados. Sus ideas eran totalmente opuestas. Valoraban el vínculo especial de los gemelos y opinaban que a los 4 años los niños aún son demasiados pequeños como para separarles. Destacaban la importancia de que los gemelos se sintiesen a gusto en el ámbito escolar y que no sufriesen miedo. Tampoco creían que una separación mejorase sus resultados académicos. No obstante, sí estaban a favor de una separación en clases superiores, una vez terminada la Escuela Infantil (Kindergarten); 39% en el primer curso de Primaria; 31% para el segundo curso; 22% para el tercer curso, un 3% para los cursos cuarto y quinto y un 3% para el sexto curso.
OPINIONES CRUZADAS ENTRE DIRECTORES Y PADRES
Un 45% de los directores afirmó separar siempre a los gemelos al inicio de la etapa escolar; un 46% afirmó que a veces les separaban, otras veces no; un 9% les colocaba siempre juntos. Un 27% de los directores reconoció que los separaron en contra de la voluntad de los padres. El 69% admitió que la separación era traumática y un 6% reconoció que era un hecho muy traumático. Un 49% opinó que era correcto que ellos –los directores- determinasen la ubicación de los gemelos, mientras un 51% opinó que los padres son los que mejor conocen a sus hijos y que el colegio debería respetar su voluntad.
De los padres, un 62% opinaron que los gemelos no debían ser separados al inicio del curso. Aun así se separaron a un 58% de los gemelos.
Los motivos por los que los padres optaron por tenerles juntos, eran:
• No veían ningún motivo para separarles
• Opinaban que la relación entre sus hijos era buena y positiva, algo que querían respetar.
• Estimaban que una separación sería demasiado temprana
• No pensaban que una separación mejoraría los resultados académicos de sus hijos
• Querían que sus hijos se sintiesen bien y no tuviesen miedo en el ámbito escolar
• Sospesarían una separación en cursos posteriores
Un 38% de los padres estaba a favor de una separación. La voluntad de estos padres era honorada en todos los casos.
Los motivos por los que los padres optaron por tenerlos separados, eran:
• Opinaban que estar separados les beneficiaba en el desarrollo de la propia individualidad e independencia
• Veían que uno de los dos era más tímido y necesitaba valerse por sí mismo
• Opinaban que una separación les ayudará a no crear dependencia entre ellos
• Pensaban que los resultados académicos serían mayores en caso de separación
• Se preocupaban por el hecho de que uno fuera más inteligente lo cual al otro podría causarle problemas
Solo un 5% de los padres estaba de acuerdo con que la dirección del colegio tomara la decisión sobre la ubicación de sus hijos gemelos. Un 95% opinaba que ellos conocían mejor a sus hijos y consideraba la situación como injusta. No obstante, solo un 51% de los directores reconoció que son los padres que conocen mejor a sus gemelos y que por tanto el colegio debería escucharles.
LA ACTITUD DE LOS PROFESORES
Este grupo estaba dividido: un 49% pensaba que la separación era buena para el buen desarrollo de la identidad de los gemelos. Un 51% pensaba que era mejor que los gemelos empezasen juntos, dado su vínculo. Un 91% afirmó no tener ningún problema en tener gemelos en clase.
¿QUÉ DESEAN LOS GEMELOS?
Un 81% de los gemelos, de 3 a 5 años, afirmó que preferían estar juntos. Lo que llama la atención, es que todas las gemelas monozigóticas, el 100%, expresaban este deseo. Este dato ya constató la investigadora y psicóloga Helen L. Koch en su investigación en 1966.
Los motivos que adujeron, eran:
1. La amistad que se tenían y el deseo de jugar juntos
2. El miedo a echar de menos al otro
El resto de los gemelos, un 19%, sí prefería estar separados. Sus motivos eran:
1. Malas conductas de uno o peleas entre ellos
2. El deseo de tener amigos propios
Las ideas de gemelos cambiaron a lo largo de los años, desde el primer curso de Primaria (a los 6 años) hasta el Instituto. El deseo de estar separados aumentó. En ello influyeron factores, como el deseo de tener una propia individualidad y ser independiente.
Mirando atrás, de los gemelos adultos, en edades entre 18 a 46 años, de los cuales un 62% fue separado en los primeros dos años de la etapa escolar, solo un 42% estaba a favor de una separación de clase durante esta etapa. Por tanto, la preferencia para estar juntos predomina principalmente al inicio de la vida escolar.
¿CUÁL ES EL EFECTO DE LA SEPARACIÓN?
Lynn M. Gordon investigó hasta qué punto la separación supuso un trauma para los gemelos. El 58% de los directores afirmó que separarles era un trauma. De los padres, un 3% afirmó que la separación fue realmente traumática y un 17% afirmó que hubo secuelas negativas. Estos datos implican que una quinta parte de los niños había sufrido a causa de la separación. De los mismos gemelos con edades entre 6-42 años, muchos reconocieron que estar separados el uno del otro había sido traumático. Enumeraban como efectos negativos sobre todo la soledad y el miedo. Pero también había efectos positivos, como aprender a estar sin el otro, adquirir autonomía y ser conocido con el propio nombre.
DISCUSIÓN
Gordon concluye que los padres justifican con buenos argumentos sus motivos por los que desean tener juntos a sus gemelos en clase, teniendo en cuenta sus necesidades y su nivel madurativo. No obstante, los colegios mantienen normas rígidas e impersonales. Este hecho también lo constató Staton, en 2012, que concluyó que solo los padres toman en serio los deseos de sus hijos, al contrario a los directores de colegio.
En esta investigación un 95% de los padres afirmó que ellos son los que mejor conocen a sus hijos y que el colegio debería tenerlo en cuenta. La conclusión más importante es que un 81% de los gemelos al inicio de la etapa escolar expresó su deseo de estar juntos, mientras un 58% fue separado. Esto implica que 2 de cada 3 parejas estaba infeliz con la decisión. Esta investigación da voz a los gemelos, tanto a los de corta edad, como a los más mayores.
CONCLUSIONES
Este estudio pone de relieve que los directores de colegio valoran la ubicación de los gemelos desde una sobrevaloración del individualismo y tienden a ignorar los aspectos positivos del vínculo de los gemelos entre ellos. Su política discrimina a los alumnos nacidos en un parto múltiple y demuestra un favoritismo hacia los hijos de partos sencillos.
Faltan conocimientos sobre el mundo de los gemelos. Un 22% de los directores piensa que los estudios demuestran que la separación beneficia el rendimiento académico de los gemelos. No obstante, los estudios muestran lo contrario: o bien no hay diferencias entre ambos grupos o bien los logros son mayores cuando los gemelos están juntos. Una relación cálida y afectuosa entre gemelos es considerada como una relación de co-dependencia. El vínculo entre los gemelos no está considerado como una parte inherente a su identidad. El apoyo y la seguridad que producen esta relación no son reconocidos, como tampoco su importancia a la hora de adaptarse a la vida escolar. Malmstrom y Davis (1999) ya pusieron de relieve en su investigación que el desarrollo de la identidad en los gemelos se retrasa y no se adelanta en aquellos que son separados en un momento temprano de su vida y que los gemelos separados se preocupan por el bienestar del otro, lo cual merma su rendimiento escolar.
Gordon reconoce que a veces una separación de clase es beneficiosa, como por ejemplo cuando los gemelos tienen una relación problemática. Pero si no hay un motivo para separarles, en la mayoría de los casos es mejor mantenerlos juntos, sobre todo durante la primera etapa de la vida escolar. Pueden incluso haber factores que aún acrecientan la necesidad por estar juntos, como en caso de una separación de los padres, una muerte en la familia, una mudanza, etc.
Esta investigación no apoya las políticas mandatarias de la separación de gemelos en la escuela para todos los casos. Como se ha venido demostrando a lo largo de muchos estudios, desde 1966 hasta hoy, algunos gemelos sufren experiencias traumáticas a causa de una separación.
La investigadora espera conseguir que las vivencias escolares para este colectivo de alumnos mejoren y que a los gemelos se les coloque de manera adecuada, juntos o separados según la voluntad de los padres y teniendo en cuenta los datos de estudios científicos en vez de tomar decisiones a base de motivos no fundados, aplicados e impuestos por los directores.
Twins and Kindergarten separation, divergent beliefs of principals, teachers, parents and twins. Lynn Melby Gordon, PhD. Lynn.gordon@csun.edu
Educational Policy, 2014
Traducción:
Coks Feenstra, psicóloga infantil, especializada en gemelos