1 de noviembre de 2009

Tengo una niña de 31 meses. Desde que nació la hemos cuidado su padre
yo en casa, sobre todo yo, y en septiembre empezó la guarde de 9,00h a 16,00h. No ha llorado nunca al dejarla, pero desde hace un par de semanas sale muy enfadada y se porta mal en casa. Siempre ha sido una niña muy miedosa y muy apegada a mí, pero no entiendo cómo al principio parecía no tener problema, y ahora cada vez lo lleva peor. No sé qué hacer, sólo quiero que ella esté bien. Gracias.

Querido Carmen:
No es tan raro como parece. Al principio todo le resultó nuevo y atractivo, pero ahora ella sabe lo que significa estar en la guardería y dejar su propia casa. Y por este motivo y quizás por otros, ahora le está costando. Te aconsejo hacerle lo más llevadero posible esta situación. Por ejemplo puedes recogerla algunos días un poco antes (si te resulta posible) y puedes darle algún objeto tuyo que ella debe ‘guardar’. Este objeto, como puede ser un pañuelo o un collar, sirve de puente entre su casa y la guardería. Y procura que las tardes sean para ella. Contar con toda tu atención le hará bien. Cuando se muestra tan negativa al principio (señal de una reencuentro difícil), intenta no darlo importancia. No le critiques ni le digas nada. Ya verás cómo al rato se calmará. Necesita este periodo de enfado: al no estar del todo a gusto en el centro, se enfada contigo por dejarla allí. Por esta razón se rebela contra ti nada más salir. Es una manera de decir: ‘Mamí, te he echado de menos’. Tenlo en cuenta, así te será más fácil mostrarte paciente y comprensiva. También puede ser que esté cansada a estas horas. ¿Duerme suficiente?
Un saludo afectuoso
Coks Feenstra

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