1 de diciembre de 2010

¡Hola! Tengo un niño que va a cumplir 3 añitos. El problema es que en casa es un niño normal, habla, canta, juega(con sus padres), pinta, dibuja… pero cuando llega al colegio no hace nada. Dice su profesora que ni se levanta, ni se sienta, ni corre,ni pinta, ni habla, ni se relaciona con ningún niño. Su maestra dice que está desesperada y yo también porque me da mucha pena que no se relacione con nadie fuera del entorno y lo curioso es que se entera de todo. Luego en casa me dice los nombres de los niños, me canta canciones que cantan en clase. Quiere decir que preste atención. Cuando vamos al parque tampoco juega con niños; le da vergüenza y no se aparta de mi lado. ¿Qué solución solucion me puedes dar? Gracias.

Querida Lidia:
Te aconsejo tener mucha paciencia y mucho respeto. Tu hijo tiene miedo en esa nueva situación; no se siente seguro y de momento no sabe hacer otra cosa que escuchar y estar allí, pero no es capaz ni de participar ni de hablar ni de actuar. Sufre seguramente, lo que llamamos, ‘mutismo selectivo’. Es un tipo de timidez, relacionado con un entorno específico: el colegio y situaciones donde se encuentra con otros niños. Pero no lo sufre en casa, ya que es allí donde se siente seguro y protegido. Explícale a su maestra qué es lo que le ocurre y si puedes, grábale imágenes de tu hijo en un dvd para que su maestra también lo vea de otra manera. Su actitud hacia él debe ser muy cariñosa, afectiva y paciente. Es conveniente que le haga solo preguntas a las que él puede contestar con un sí o un no (al principio lo hará con un leve movimiento de cabeza). Cuanto menos le presione, mejor. Los intentos de la maestra parecerán no tener efecto, pero no es así. Lo único que ocurre, es que el cambio en el niño será lento.
Lo que se suele hacer en estos casos, es que la madre acuda a la clase alguna que otra vez, después del día escolar (o a mediodía o al principio) para que maestra, madre y niño estén juntos. En esta situación el niño sí hablará a su mamá y entonces aprenderá, poco a poco, a hablar también a su profesora. La presencia de su madre es importante para que él dé este paso. Una vez que ya hable directamente a su profesora, se incluye algún niño en este ‘encuentro’ para que el círculo de personas con las que él hable, vaya ampliándose. Poco a poco se incluye a más niños. Me parece también una buena idea que la maestra le ponga a su lado. El primer paso debe ser que tu hijo empiece a participar en las actividades, como pintar. Lo de hablar hay que considerarlo como el último paso, ya que es lo más difícil para él.
Sigue yendo con él al parque. Invita también algún niño de su clase a casa para ver si esto le facilita las cosas.
No dudes en escribirme de nuevo cuando quieras.
¡Muchos ánimos!
Un saludo afectuoso
Coks Feenstra
p.d. la terapia de juego para el niño en estos casos no se recomienda, por no tener efecto. Como el problema está en una situación concreta, es preferible optar por la participación de la madre en clase, tal como expliqué antes. Este proceso sí es conveniente que lo elabore un psicólogo infantil.

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